La vida es como la ropa. Vas con la ilusión de comprar algo bonito, la ansiedad de..... ¡¡mira lo que e visto¡¡. Llegas al lugar, y esperas mirando , que eso que buscas te vaya encontrando. Sabes lo que quieres, pero tardas en llegar al sitio donde la tengan "colga", bueno ya lo he visto, voy a ver que tal, a ver que tal me queda, pero estoy "ilusioná". Pruebo, por este lado bien, por aquel fenomenal, ale me la llevo conmigo, que bien que voy a estar. La tienes ahí guardada, esperando estrenar, esperando el momento pa ponerme "niquelá". Mare meua que nervios, ale ya está, con zapatos nuevos y bien "peiná".
Pero puede ser que ocurra, que hay mas igual, que me haga un descosido, o me vuelva bien "manchá". Entonces todas las alegrias, se convierten en seriedad. Pues mira, era un roto, ahora tendré que remendar, y un remiendo tras otro, este trapo no vale pa "ná". Ahora lo tiro y otro, que total hay más.
Empieza otra vez el ciclo, empieza otra vez la aventura, de volver a encontrar otro trapito que me deje bien "apañá"
A la mayoría de cosas en la vida, les pasa igual, ganas, deseo, alegria, y volver a empezar . Todo son ciclos, todo es real, y la vida gira y gira y nos quedamos tal cual, esperando el momento de poder encontrar el vestido que se acople a este cuerpo y a esta edad. Y así vamos viviendo dia a dia en esta sociedad, con ganas , ansias y deseos, deseos de madurar. De sentir que cada dia, estreno un bonito disfraz. Porque dentro del trapito es donde queremos ocultar eso que no nos gusta y no queremos enseñar.
Cada dia es un festivo, es como un carnaval, entre gente vas andando toda "disfrazá". Cuando nos quitamos las mascaras, en nuestra soledad, es cuando realmente, somos de verdad.
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